
Revolviendo entre fotos viejas encontré esta. Mis hermanos y yo orgullosos de vestir la celeste. Era antes de Paco y de Zalayeta.
Es increíble como cambia uno con los años, la última camiseta celeste que tuve me la compré cuando salimos campeones de América en el 95 y la prendí fuego al quedar fuera de Francia 98. Se quemó rápido porque era trucha y el material era altamente inflamable.
Hasta el año pasado también tenía la camiseta de Nacional, ahora ni esa me atrae. Mi equipo de fútbol, con el que realmente sufro y vibro, es con el Monte VI universitario. Al menos en ese equipo los jugadores juegan por la camiseta. Como antes.
En una de esas un amigo tiene razón y es la hora de empezar a alentar a Togo para el mundial.