viernes, febrero 16, 2007

Odio el carnaval

Sí. Odio el carnaval: las murgas, los tablados, el falsete.
Me dirán que soy fascista, anti cultura, amigo de Bush.
Pero claro, ustedes no viven en frente al Velódromo, en donde cada noche de domingo a domingo, de 22 pm a 2 am las murgas no me dejan dormir con su ñaca, ñaca, ñaca, ñaaaaa…
A todo volúmen.
Quizá en marzo, cuando el Velódromo se silencie, vuelva a sentir algo de cariño por las murgas. ¡Marzo! ¡Falta una vida!
Tengo sueño.

12 comentarios:

Al Nonino dijo...

Tengo el mismo problema: vivo en Tres Cruces. Pero no las odio: me faltan unos metros de cercanía para eso.

eresfea dijo...

El Carnaval, si se mira bien, es una fiesta de hipócritas.

Lebowski dijo...

Fascista, anti cultura, amigo de Bush.

Si tuvieras a Plácido Domingo cantando en el Velódromo todas las noches odiarías la ópera.

The last chans dijo...

Eresfea, ¿cómo es eso de la hipocresía? Expláyese.

Roberto dijo...

Yo no vivo cerca de ningún tablado y odia al carnaval igual que vos. Es el climax de la demagogia. Es el tercermundismo materializado.

Bloody dijo...

Concuerdo con roberto y Eresfea. No more.

Anónimo dijo...

Vivo a pocos pasos del tablado del Defensor Sporting y toda mi vida me quejé de las murgas, hasta que hace seis años fui a un tablado. De ahí en más, voy todos los años.

tan versátil como acústica dijo...

apoyo al usuario eimb, sino puedes contra tu enemigo únete a él.

Al Nonino dijo...

Eresfea, ¿dónde quedó aquello de la sinécdoque? Lo del todo por la parte y la parte por...

Anónimo dijo...

Ni fu ni fa. Eso sí, el acento en volumen le da más volúmen a tu opinión.

Natilla dijo...

Ja! es costumbre pobre loco. Yo viví toda la vida pegado a un salon de fiestas y era matemático: viernes y sábados siempre tocaba fiesta. Y no faltaba la cumbia villera a todo lo que da (aaaahhhh!!!!) Y mi cuarto estaba pegado al salón. Como será que ahora puede pasar un huracán de noche que no me despierto.

Anónimo dijo...

Creo que el problema tiene una solución para satisfacer tanto a aquellos que disfrutan el carnaval , que no son pocos, com a aquellos que tienen derecho a dormir en paz. Es una solución técnica sencilla: en lugar de poner en los tablados varios parlantes de alta potencia en el escenario dirigido al público hay que colocar a los costados de la platea parlantes de menor intensidad a la que se usa actualmente y dirigidos hacia los espectadores desde una altura de 2 metros y con una inclinación de alrededor de 30 º con la vertical. En esta forma ( digamos con 6 u 8 parlantes: 3 o 4 de cada lado) se "encierra el sonido" y prácticamete no sale a la calle. Si los sonidistas regulan con un sonómetro en el medio de la platea para que exista una presión sonora equivalente a unos 50 a 60 dB(A)la audición es excelente. Con la disposición actual, se utiliza mayor energía que con la aquí propuesta y no es necesario "matar" al público que está cerca del escenario para que oigan los de atrás.Hay que convencer a los dueños del tablado para que los sonidistas adopten estas medidas. Además sería bueno que en "una buena" los anunciadores pidieran al terminar la función que quienes salen no anden a los gritos ni a los portazos con los autos.
Voy al tablado, lo disfruto cuando se baja el sonido. Me gustan las murgas y poder dormir cuando tengo necesidad.
No se podrá hablar, cada uno en su barrio. con lus dueños del tablado y explicarles que humanamente todo es posible? Comenzamos?
Amantedetodaslasmúsicas